-Capitán, se acerca el enemigo ¿Qué debemos hacer?
-Izad la bandera, si hemos de morir lo haremos sabiendo que muchos otros no lo harán por nuestro sacrificio.
(3 horas después)
-¡Capitán! ¡Ha pasado algo increíble!
-Sólo un milagro puede salvarnos en esta guerra, no cantes victoria.
-No puedo evitarlo, mi capitán. Mientras nosotros izábamos la bandera todos los guerreros han pintado otras más pequeñas y las han izado de tal manera que había miles de ellas ondeando en el aire. El enemigo no teme a una personas, pero si que teme a miles.
Ey! Me ha gustado muchisimo! la fotografía muy irónica pero sin ser vulgar, está preciosa y el texto está simpático, me ha parecido una entrada muy elegante y natural! me gusta me gusta!
ResponderEliminarMuchas Gracias Nia-sempai!!
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