martes, 31 de agosto de 2010

En la lluvia de estrella me tocó un lucero

Es la primera vez que dedico unas letras a una persona. Soy, como bien podría decirse, un poeta sin musa. O lo era...

La lluvia de estrellas duró cuatro días y yo no esperaba en ningún momento que ninguno de estos astros llegara a mis brazos y que me tocara, como dice el maestro Salvatore, "con su poética luz cargada de misterios". Mucho menos esperaba que un semidios vestido de lucero me dijera al oído que me había esperado largo tiempo. Mi asombro era visible, creo de eso todo el mundo se dio cuenta. Pero no porque no lo esperara, que es cierto, pero sobre todo porque en el fondo lo deseaba. Había deseado ya que hubiera pasado esto.

Como describir aquéllas noches enteras, pluma en mano y tintero en la mesa escribiendo sobre el pergamino las frases de amor que te diría si esto hubiera pasado. Qué pena que aquéllas frases se quedaran en el tintero que es mi cabeza y se mancharan de la tinta que es el tiempo

Ahora, el devastador paso de los días y el qué dirán ha borrado esos rasgos de romanticimismo desesperado y la esperanza de que esto pasaría, y por eso, cuando pasó, yo estaba desprevenido.

Pero... ¿Y qué?
Tengo la pluma y el tintero
¿Qué tal si empezamos a escribir ahora la historia?

domingo, 22 de agosto de 2010

La eterna lucha por la libertad

 

Son muchas las metas que tiene colega y son muchas las razones por las que lucha. En España (que tenemos fama de país liberal) la homosexualidad está aceptada social, política y legalmente; Hay leyes contra la homofobia, está permitido el matrimonio entre personas del mismo sexo así como la adopción de menores por parte de este colectivo.

Con tal grado de aceptación social de los homosexuales ¿Qué más queda por hacer? dirás tú. Pues mucho, porque aunque tengamos fama de país liberal, en el que hay leyes contra la homofobia y la xenofobía que  protegen a las personas diferentes, este tipo de personas aún seguimos sufriendo en nuestras carnes el alejamiento del mundo y los insultos y discriminaciones por parte de las personas intolerantes. Colega lucha por proteger a las personas homosexuales de dichos abusos. 

Muchas personas empiezan a aceptar su propio yo y dejan los tapujos atrás para ser feliz cuando descubren que hay personas que viven su homosexualidad y no son discriminadas, al contrario, son aceptadas y pueden vivir su vida sin mentir y sin actuar en esta gran obra de teatro que es la vida, la gran mentira. Colega intenta también facilitar el acercamiento a dicho colectivo. Ofrece ayuda telefónica y personal.

Colega también hace campañas de sensibilización sobre el sexo seguro. En colega la prueba de detección del VIH o el SIDA es gratuita, indolora y de respuesta inmediata. También se hacen mesas informativas con información sobre el VIH-SIDA, la homosexualidad, la prueba del VIH-SIDA, donde se reparten perservativos y lubricantes, además de información personal por parte de los voluntarios. En periodo escolar se hace charlas de sexualidad por los centros educativos de la provincia. 

Como estas, son muchas las labores sociales que Colega Almería hace en la provincia. Además de organizar eventos en los que las personas del colectivo pueden conocerse y conocer los lugares de ambiente. Este año 2010 se organizó el primer desfile del Orguyo Gay con motivo del día de la Libertad Sexual, y todos los años tiene una caseta en la Feria de la Virgen del Mar, este año acompañada de Dracena Pub.

Si quieren más información acerca de la asociación, participar como voluntario o cualquier otra consulta pueden llamar al 950276540, o ir personalmente a la oficina que está en la C/ Rueda López 17, 2-1.

Sin más, yo os invito a pasaros por la caseta Dracena-Colega que estará estos días en el recinto ferial.

miércoles, 18 de agosto de 2010

Lo tienes delante, míralo


¿Quieres saber cuál es la verdadera luz en la oscuridad?
Pues no busques en religiones, ni en filósofos, ni en libros, ni en drogas...

BUSCA EN TUS AMIGOS
- allí está la respuesta y la cura -

sábado, 14 de agosto de 2010

La historia de Ego

Hoy os quiero contar una historia:

Érase una vez un niño, que se llamaba Ego. Era un niño normal, más bien feucho: tenía gafas, era bajito, era más blanco que la leche y tenía los ojos pequeños, la nariz enorme y el pelo se le bufaba hasta tal punto que parecía un león. Tenía los pies y las manos grandes y el resto del cuerpo pequeño. 
Ego recibía toda clase de elaborados insultos, dichos y redichos con gran maestría por personas que estaban estudiando la carrera universitaria de "Aplastar al débil". Había alguno de éstos estudiantes que por un breve espacio de tiempo no mayor de quince minutos que hacían que Ego se sintiese aceptado e incluso querido porque era necesario para algún tipo de broma pesada o insulto sobresaliente.

Como es normal, al andar pisaba su propia autoestima, y se decía: "Si nadie me quiere es por algo, ¿Por qué me voy a querer yo".

Un día, Ego conoció a Confianza, una chica que sufría los mismos abusos que él pero que sin embargo tenía un apoyo que le servía para seguir adelante y avanzar. Esos apoyos se llamaban: Libertad, Aceptación,  y Cariño, sus amigos.
Ego los conoció y con ellos descubrió un nuevo mundo. Confianza le enseñó que él valía, que los miedos eran malos y que la confianza le ayudaría a ser más seguro y por tanto más humano. Libertad le enseñó la el caramelo de los dioses, la libertad para comportarse como es y que, junto a la confianza le dió una verdadera personalidad. Aceptación le enseñó que todo el mundo tiene características, algunas buenas y otras no tan buenas pero que todas ellas forman a una persona tal y como es, Cariño le enseñó a querer a los demás porque si aprendía a querer y demostraba esa seguridad, la contagiaría a todos, de la misma forma que ellos le contagiaron a él esa confianza, esa libertad y esa aceptación.

Pero la historia no acaba ahí, porque Ego pudo enseñarles algo a ellos también. Descubrió algo que sin ellos no había podido vislumbrar, aprendió a quererse como es y a descubrir sus cualidades. Porque todo el mundo las tiene pero no las descubre hasta que reflexiona sobre ellas. 

Así el grupo de Confianza, Libertad, Aceptación, Cariño y Ego, formaron la cadena de la persona completa. Ellos formaron lo que quizás seas tú, o lo que puedes ser si has entendido este mensaje. Porque va dirigido a ti, querido lector.

viernes, 13 de agosto de 2010

Esperando a Caronte, el barquero

Últimamente me ha dado por pensar mucho en la muerte, y cuando pienso en ello siento vértigo.
Me pregunto ¿Qué pasará cuando yo muera? al margen de lo que pase con mi alma el mundo seguirá girando y el tiempo pasando, mi recuerdo será cada vez más débil hasta que ya no quede ni mi nombre en la boca de mis seres queridos porque uno a uno ellos también irán muriendo.

La gente seguirá con su vida de la misma foma que la tierra seguirá girando alrededor del sol, hasta que ya no quede nada mío en la tierra. Y entonces me pregunto.

¿Qué sentido tiene mi vida AQUÍ?

Pues la verdad no lo sé y sólo puedo resignarme a que Χάρων Khárôn pase mi alma a la otra orilla y que mi cabeza olvide, o la obligaré a olvidar todo lo que deja aquí.

viernes, 6 de agosto de 2010

Abyssus abyssus invocat I


En mi último suspiro, en la última bocanada de aire que tomo antes de abandonar este mundo y la vida, la desesperación acude a mis ojos en forma de filtro en blanco y negro, mi mundo se convierte en una película muda, dejo de oír lo que me rodea y todo se vuelve confuso y extraño. En mi cabeza sólo escucho una música nerviosa que me hace sentir mal, unos ruidos que convierten mi vida en un infierno confuso ¿Qué me pasa?

Estoy solo en un puente gris y empedrado, rodeado de una valla de aspecto lóbrego y gótico, las altas barras del vallado se alzan al cielo terminando en una punta desafiante que rasga las nubes y tapa la gran luna llena que hay en el cielo, coronada de figuras extrañas que van de aquí para allá cruzando el basto cuadro negro montadas en escobas.

El sonido de un violín entre tanto ruido me extraña e intento agudizar el oído para seguirlo. Doy un paso y de repente el ruido se convierte en una orquesta de cuerda frotada dando notas picadas, como en las películas antiguas de terror. De fondo suena el violín que escuché antes, hace una triste melódia armónica con los picados nerviosos de la orquesta invisible.

Corro, esto es muy extraño. No sé dónde estoy, dónde voy ni cuánto tiempo llevo corriendo, sólo sé que la orquesta se acaba de callar, aliviado me siento en el suelo y miro a mi alrededor.

Estoy en un bosque de árboles oscuros y extraños que elevan sus retorcidas ramas al cielo creando sombras fantasmagóricas. Entre los árboles me siguen muchos pares de ojos, como linternas encendidas que me enfocan a la cara, la sensación es tan viva y tan violenta que decido salir corriendo. Miles de pares de alas me siguen, las oigo luchar contra el viento detrás mía.

Una coral canta en latín, los veo andar hacia mí non passibus aequi, son un grupo de personas encapuchadas vestidas de negro que portan atriles que acaban en antorcha, están desordenados y sin formar, pero el sonido no se deforma, sigue sonando tan dulce como si estuviera cada uno en su lugar.

Estoy rodeado, por un lado me siguen unas criaturas voladoras a las que no me atrevo ni a mirar por miedo a descubrir algo más monstruoso de lo que espero, y por otro lado un grupo de personas encapuchadas vestidas de negro cantando "Ave Veronica, improbitas plena, ave venefica". No puedo más, he de hacerlo.

Cierro los ojos y el dolor me abrasa, mi espalda se convulsiona por los golpes de mis propias alas contra mi cuerpo, rajan mi piel ante gritos de desesperación y aparecen a mis espaldas dos alas grandes y negras, magníficas y esbeltas. La cabeza parece que me va a estallar, pero he de hacerlo, he comprendido que no se puede vencer al destino y que siempre acaba volviéndose contra ti, aunque intentes negarlo y negarte tú mismo. Aparecen dos cuernos en mi cabeza, mis cabellos arden convirtiéndose en una manta de fuego que me cubre la cabeza, las piernas se me cubren de pelo y cambian de forma, pareciéndose más a las patas de una monstruosa cabra gigantesca que a las piernas de un ser humano, los ojos se me vuelven amarillos y de repente el dolor cesa.

Miro a la coral y les digo lo que una vez aceptada mi naturaleza debo decir.

-Dad la bienvenida a vuestro amo, queridos religiosos.

miércoles, 4 de agosto de 2010

Tus ojos


¿Cómo describir el frenesí en el que tus ojos me obligan a entrar? ¿Cómo describir tus ojos?
Tus ojos me fascinan tanto que no sabría ni decir su color... Tienen, como dice el maestro Salvatore, una poética luz cargada de misterios. Y uno de esos misterios es la pasión desenfrenada que sufre mi cuerpo cuando te miro.

Me flaquean las piernas y los brazos no pueden ayudarme a mantener el equilibrio, mi mente se congela y no puede pensar en otra cosa que no sea el frágil brillo de mi reflejo en tu pupila, el habla se me paraliza y balbuceo sonidos sin sentido pareciendo un niño de cinco años.

No sé como voy a decirte mi nombre si no puedo hablar.