Unos vienen otros se van, como el tiempo y el aire que a voluntad giran el mundo y todo alquimista sueña con cambiarlos. Entre el gentío destacará alguien especial pero mis ojos no podrán verlo porque la multitud me atrapó y me dejó ciego.
Si te busco entre la gente te perderé, y si te pierdo no volverás.
Creo que el cruel destino nos alejó y nadie puede luchar contra el vasto e imperturbable designio de la cruda realidad, de alma negra y alas invisibles.
Adiós.
Esa persona radiara una luz inmensa que no podrás olvidar; lo malo es que el mundo (y sobre todo las personas) estan muy contaminadas para ver la belleza que tienen delante.
ResponderEliminarEn fin, te quiero!
Cuchi! no sabia que tenias blog! te añado vale?:3
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