sábado, 19 de mayo de 2012

El preciso momento


Hace escasos minutos me han dado la idea de este post y así le doy algo más de vida al blog que en un principio nació para desarrollar mis ideas y expresarme, y siendo tan buen método y habiendome ayudado tanto lo he dejado un poco de lado. En este caso, esta idea es para ayudar a los demás y no a mí.

 Exactamente han pasado siete días desde que retomé el contacto con un primo mío bastante más pequeño que yo. No es que dejásemos de hablar sino que la diferencia de edad nos tenía algo alejados, y yo era para él poco más que un bicho raro que escribe cosas que nadie entiende y que dice cosas que tampoco suele entender nadie.

Yo hace algo más de dos años que di el paso definitivo y hablé a mi familia sobre mi homosexualidad, o por lo menos a quien no lo sabía. Fue una tarea complicada porque la mayoría de la familia que no sabía nada era de etnia gitana razón por la cual siempre creía que tendrían menos disposición a creerme. Estas cosas, el hecho de que sea homosexual y que tenga una pasión poco compartida en mi familia gitana por la literatura, el teatro y todas las artea en general (excepto la música, dado que todos le dan de una forma u otra) me han alejado mucho de ellos y por lo general mis primos pequeños saben poco o nada sobre mí hasta que se molestan en conocerme.

Este primo, que tiene catorce años sólo me hizo una pregunta que, ni aún habiéndo estado algunos años participando en una asociación sobre derechos y salud LGTB (Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales) llamada Colega y habiendo sido delegado de la parte joven donde tantas veces he preparado talleres sobre autoaceptación y salir del armario no me había hecho yo nunca.

No es que él (mi primo) sea homosexual, dice no serlo, pero tiene curiosidad por saber como vivimos quienes lo somos estas fases en las que nos damos cuenta, este shock que en un principio te da cuando te ves mirando a una persona de tu mismo sexo y te obligas a no hacerlo, hasta que un día te dices tímidamente "soy homosexual". En mi caso no sé muy bien como pasó, mis hormonas me han jugado malas pasadas en la pubertad y una vez con doce años me pregunté a mí mismo: "Jose ¿Eres gay?", y algo confuso me respondí de forma afirmativa, sin llegar a estar muy seguro. Es muy difícil para mí saber cómo pasó esto.

Pero el tiempo, y lo que he leído sobre psicología, lo cual tampoco es demasiado, lejos de la psicología del paciente me han ayudado a reflexionar un poco sobre este tema. A él le he respondido esto:

" la gente tiene miedo de decirselo a sí mismo o decirlo en voz alta porque creen que es algo malo o algo que los cambiaría y los volvería diferentes, ya sabes que cuando se habla de homosexuales se hace como si fuera algo raro. Pero no es así, y una vez que se comprende eso y uno se resigna a lo que en realidad es y lo que será, sin ridiculizarse y teniendo claro que lo que hace no lo ha elegido y que no tiene remedio, es cuando se da cuenta."

El problema de ser gay es el miedo al odio y al rechazo que vemos desde que somos pequeños. Los niños se tratan de maricón y desde el principio es algo malo que está en las bromas y las ridiculizaciones de los niños. Eso lleva a los adolescentes a creer que lo que hacen no es normal, no está bien, es motivo de burlas y tratan de engañarse a sí mismos. Lo peor siempre ha sido la soledad, y por suerte es algo que está alejado de la actualidad, ya que el conectarse a internet da a los adolescentes un sinfín de páginas de información o centros sociales donde informarse y ver que no están solos.

Para los padres internet también es una ayuda, poder hablar con otros padres, así como toda la información disponible para saber llevar la situación. Una gran ayuda sin duda. 

Este post es hoy un mensaje de apoyo tanto para los jovenes que no saben como llevar la situación como para los padres de éstos. Cuando yo tenía doce años me hubiera encantado tener un hermano mayor que me hablase de estos temas y me hubiese ayudado a dar los pasos correctos de la forma menos dolorosa para mí. Lamentablemente no lo tuve y es algo que no me gustaría que otros no tuvieran que pasar. Así que, querido lector, si alguna vez lo necesitas, aquí me tienes. Yo seré tu hermano mayor, y tienes mil formas de encontrarme (twitter, facebook, email...).

sábado, 7 de abril de 2012

La nueva filosofía de la vida


¿ Esto es vida ?

-Digame, señor. ¿Qué he de cambiar?
-Todo -respondió el anciano ciego sin dudar.
.¿Está seguro?
-Yo sí. ¿Pero lo está usted?

El silencio incómodo predice un pensamiento. Y el pensamiento del joven podía llegar a ser desesperanzador si no era controlado o entendido. ¿Estaba él seguro? Su vida había sido construída en torno a unos valores quizá incorrectos que ahora regían su pasado y futuro.

-Usted es el sabio -predijo sin mojarse.
-En todos mis años, nunca me vi en su situación.
-¿Y eso por qué?
-Porque siempre estuve seguro en mi vida.
-¿Cómo lo hizo?
-Algo complejo, sin duda... Yo nunca me vi en la necesidad de preguntar a mi yo anciano.
-Quizás sea eso.
-Cambie, joven. Esa es la respuesta.

El joven asintió y se alejó del espejo.
Había llegado la hora.